INTRODUCCION



"Tanto si piensa que puede, como si piensa que no puede, de cualquier modo está en lo cierto" Henry Ford


Montañista amigo, con el conocimiento, lo difícil o desconocido se vuelve fácil y accesible. ¡Que poca información teníamos en la decada del 90 y años posteriores, de muchas de las más altas montañas de Argentina y Chile! Algunas veces ascendimos una cumbre que no era la principal y otras tuvimos que dejar la expedición como mera exploración al recién poder determinar, ya al fin de la misma, por donde se debería haber accedido o ascendido! Y VOLVER. Durante años fui informando, con relatos y películas, de los resultados de las expediciones que realizabamos y las he condensado en este blog. Espero te sirvan mis relatos.

Jaime Suárez
jaimesuarezgonzalez@gmail.com

NO QUIERO MINERAS, O SUS CAMPAÑAS DE INTELIGENCIA, ANUNCIANDO EN MI PÁGINA...

Si le es útil la información de este blog, no deje de teclear en su publicidad, ayudará a mantenerlo; toma tiempo y casi nunca se recibe un "gracias"

13 octubre, 2008

TRES CRUCES







Macizo Tres Cruces desde la cumbre del Walter Penck




MACIZO TRES CRUCES

ascendido el 24 de Noviembre 2001

CUMBRE PRINCIPAL SUR 

Por Jaime Suárez

INFORME DE LA EXPEDICIÓN

Integrantes Expedición:
Flor Boscán (FEVME – Venezuela) Mirta Sarmiento (C.A.M.)
Jaime Suárez (C.A.M. – UPAME) Hans Siebenhaar (Mendoza)
Alejandro Gimenez (JANAJMAN – Salta)

Cumbre Alcanzada:
Pico Sur Internacional – Limítrofe- 6.749 m. posición 27°05´925S y 68°46´693.
Altitud:
6.749 m sobre el nivel del mar. Es la séptima altura de América luego del Aconcagua, Pissis, Ojos del Salado, Mercedario, Huascarán y Bonete, y la sexta cumbre en altura de las argentinas.

Ubicación:
El Macizo Tres Cruces se encuentra entre Chile y la Argentina, precisamente entre las provincias de Catamarca y de Atacama. La posición de la más alta cumbre de 6.739 m está sobre los 68°46´700O y los 27°05´900S, siendo su punto de mayor altura hito internacional fronterizo. Es una formación de varias montañas que se aprecia de forma diferente según el lugar desde donde se lo mire. Accediendo desde el Norte de Chile, luego del retén de Carabineros de la Laguna Verde y en dirección a Maricunga, se puede observar al macizo prácticamente en toda su magnitud, solo que hay que previamente conocerlo, lo que no es fácil ya que son muchas las cumbres, que rondan los 6.000 metros, que rodean la ruta.


Las cúspides del Tres Cruces que se aprecian desde Maricunga






Foto (de Mariano Muñoz) cumbre central, 6.620 m. que en muchos ascensos anteriores se consideró como la principal. Aquí estamos a 11 km de distancia y con espalda al Salar de Maricunga.






Esta cumbre 6.539 m la ascendimos con Mirta en una anterior expedición no encontrando comprobante alguno, siendo los primeros en hacerlo. La cumbre principal, quedaba unos doscientos metros más adelante y doscientos metros más arriba. Volveríamos y así lo hicimos.

( Hay relato de esta expedición al final, fue en Noviembre de 1997 )




Ruta:
Glaciar Sur, pared Argentina.
Dificultad:


Tres Cruces, desde la Laguna Negra de la Laguna Verde del Pissis




Flor y Jaime, al fondo el sistema Tres Cruces, desde el Norte



...





Tres Cruces, campamento Base



Nivelamos el piso lo mejor posible usando las piquetas y sacando las piedras grandes, y armamos nuestras carpas. Y tras preparar la cena nos dispusimos a dormir mucho, ya que al día siguiente comenzaba la verdadera aventura.





Flor dando los últimos toques a su carpa. Al fondo la cumbre principal del Tres Cruces


Habíamos recorrido 8,35 km. desde el Campamento Base. Al fondo del camino a seguir, a unos aproximados 6 kilómetros, sobresalía la cúspide del Tres Cruces mostrando en su sector sur parte del largo glaciar por el que deberíamos ascender. Durante el amanecer, por lo expuesto de nuestras carpas, sin ningún tipo de protección del relieve, leímos 12 grados bajo cero en el termómetro exterior.





Tres Cruces, hacia el segundo campamento






Campamento dos al Tres Cruces




Hacia el último campamento de altura, el tres




Tres Cruces, campamento 3 de altura



Alejandro agita los brazos a la distancia indicando la existencia de una "segunda cumbre"





Cumbre del Tres Cruces



Mirta y Flor eran las primeras mujeres que coronaban la mayor altura del Macizo Tres Cruces.



Regresando de la cumbre del Tres Cruces


Comenzaba luego el delicado regreso sobre las mismas huellas sobre el glaciar, que nos había permitido subir.






Tres Cruces, vista de su principal cumbre, la Sur, desde la Laguna Verde del Pissis




Tres Cruces, desde el Sur, entrando por la lagunita azul, camino al Pissis.
Foto de exploración anterior


Jaime Suárez – Diciembre 2001


Película Dra. Flor Boscán (Venezuela)







-----------------------------------------------------------------------
Cronología de ascensos a la cumbre principal del Tres Cruces, compilada por Guillermo Almaráz

NEVADO TRES CRUCES

Posición Ruta Integrantes Fecha Descripción.


Primero Polaca Witold Paryski
26-02-37 Filo Norte. Acceso por cara E.
Aprox. Tres Quebradas (S)
Camp. En Río Salado, Base del
Col, Col de 6000.


Segundo? Chilena Gastón Muga, Patricio Cortés?

1973 Acceso desde Oeste. Camp. Col de 6000.
Aprox. Maricunga.

Tercero Chilena Phillipe Reuter, Sabine Reuter y otro

17-05-89 IDEM Art. Sky Top Ten.

Cuarto Chilena Greg Horne (Canadá)

16-03-95 .

Quinto Chilena Alex Von Götz, Blumjenstock, Unterholaner

07-03-98 (Alemania)
Encontraron comprobante de Paryski del roquerío amarillo.

Sexto Sur Oeste Muratti, Casas, Bianchi, Kvarta C, Kavarta M, Gustavsson, Crocco, Susso

13-01-00 Glaciar Sur. 2 camp. Hasta basepared. Camp. 6000. Ascenso
por lado O del Glaciar Sur.

Séptimo Chilena Alexis Malafosse (Francia) Solo.

08-02-00

Octavo Directa Sur Guillermo Almaraz, Fabian González, Rolando Linzing (Mar del Plata)

01-10-00 Glaciar Sur directa. 2 camp. Hasta
base pared. Aprox. Tres Quebrad.

Noveno Chilena Ivan, y Luigi, c/ Erik Galvez -guía-

04-01-01
Italianos con guía chileno.

Décimo Sur Este Jaime Suárez, Hans Siebenhaar, Alejandro Gimenez, Mirta Sarmiento, Flor Boscán (Ven.).

24-11-01 Glaciar Sur. Aprox. Desde NE
Exp. UPAME , 2 camp. 1 en pared.


Undécimo Chilena Alberto Redes, Cristian Beiza, Germán Madrid
04-01-03
Grupo Chileno.

Duodécimo Chilena Darío Bracali y Paula Semergian
27-02-03 Encontraron comprobante de Parisky roca negra.

Décimo tercero Chilena John Biggar
Mar-03 .






           TRES CRUCES




                             ...en busca de los    6.749 m. s. n. m.                           
Expedición realizada desde el 8 al 15 de Noviembre de 1997 por miembros de UPAME, Club Andinista Mendoza y F.E.D.M.E.

Fecha de Inicio: 8 de Noviembre de 1997.
Fecha de Finalización: 15 de Noviembre de 1997,
Cumbre Alcanzada: Pico Sur-Este Chileno 6.539 m.
Fecha de Cumbre: Viernes 14-11-97
Objetivos:      
·    Búsqueda de la cumbre principal.
·    Descubrimiento de las cumbres, y exploración de este ignoto sistema, con sus rutas de acceso y alturas.
·    Determinación de la cumbre verdadera mediante GPS.
·    Documentación fílmica para información y antecedentes.


Integrantes:
                        Jaime Suárez (C.A.M. – UPAME – FRAE )
                        Mirta Sarmiento (C.A.M.)
                        Mariano Muñoz (Segovia- España)
                        Hans Siebenhaar
                        Marcos Radich
Cumbre Alcanzada: Pico Sur-Este Chileno 6.539 m., del Tres Cruces.

MACIZO TRES CRUCES


Introducción:
El bien llamado Macizo Tres Cruces, es en primera instancia una formación de 3 grandes montañas piramidales cercanas entre sí que discurren prácticamente de Norte a Sur y que se “descubren” al ser observadas desde el Oeste, precisamente desde el Salar de Maricunga, apreciándose como tres picos de un sistema.
El primero, con un glaciar a su Sur y es el mas cercano a la ruta internacional chilena. Alcanza una altura de más o menos 6.100 m, y le llamaremos Norte. El segundo en orden desde la ruta es el Pico Tres Cruces Central y tiene 6.620 m, con un canal en su noroeste de aparente fácil acceso – y es la que los lugareños y muchos carabineros catalogan como el de mayor altura -, lo que causa confusión. Finalmente el pico Sur o Cumbre Chilena, con 6.539 m cierra el trío visible.
Pero de frente, el perfil de alturas no delata la verdadera cumbre, (de la que ya charlaremos, ya que es una cuarta) que es punto limítrofe y que está atrás de la Sur. 
Tampoco cuando uno entra por el Norte desde la ruta internacional, ya que se mimetiza en un cúmulo de cumbres varias.
La posición de la más alta cumbre, de 6.739 m, está sobre los 68°48´O y los 27°07´S, siendo ése el verdadero hito internacional fronterizo, no sabiendo si a esa cumbre especial alguien llegó.
Si se ha llegado a la central de las tres visibles.

Ubicación:
El Macizo Tres Cruces se encuentra entre Chile y la Argentina, precisamente entre las provincias de Catamarca y de Atacama. Su pico más alto, dentro del sistema o mejor dicho al final del mismo, constituye punto limítrofe entre ambos países.
Es la séptima altura de América luego del Aconcagua, Pissis, Ojos del Salado, Mercedario, Huascarán y Bonete, y la sexta cumbre en altura de las argentinas.

La Partida:
Partió nuestra expedición desde Mendoza,  tras el  rito de completar las 10 cumbres más altas de la República Argentina, de las cuales 5 son limítrofes con Chile (Ojos del Salado, Tres Cruces, Llullaillaco, Incahuasi y Tupungato) y 5 se encuentran dentro de nuestro territorio (Aconcagua, Pissis, Bonete, Mercedario, y  Nacimiento (Walter Penck).
Personalmente iniciaba mi novena  y diferente cumbre de más de 6.500 metros, situación que me preocupaba,   dada la poca información que teníamos de nuestro objetivo.
Nuestros 2 vehículos 4x4 atravesaron San Juan, y La Rioja, llegando luego a Tinogasta y a  Fiambalá – lugar este en que se debe reportar a Gendarmería Nacional y realizar los trámites de aduana –. Desde allí, por la ruta que conduce al Paso San Francisco accedimos a Pastos Largos, que  está a unos 35 km .al norte de Chaschuil.

Pastos Largos:
Llegamos tras un agradable viaje de un día en que recorrimos casi 1.000 km.. Es Pastos Largos prácticamente el lugar donde iniciar aclimatación y llenar en forma segura nuestros bidones con agua. Se constituye este vital elemento en algo fundamental, sin lo que no se puede continuar una expedición. Es necesario llevar al menos 20 litros por persona ya que más adelante sólo expertos arrieros pueden determinar donde obtenerla,  dada la contaminación natural por minerales y la salinidad existente.
Pasar la noche en este refugio constituyó un descanso. Aprovechamos para ordenar nuestros pensamientos y poner a punto nuestros altímetros y mapas. El día siguiente  tratamos de comer e hidratarnos lo mejor posible.
El GPS nos marcaba que estábamos a 86 km. de la cumbre, por supuesto en línea recta.
Revisamos nuestros papeles: Teníamos el permiso de la Dirección Nacional de Fronteras y Límites del Estado de la República de Chile, que habíamos tramitado a través de la Federación de Andinismo y Escalada  y la Federación de Andinismo de Chile, la que una vez más nos había servido con desinteresada eficiencia. También un mapa del Instituto Geográfico Militar del Ejército Argentino, con la ubicación de la montaña y su altura, pero sin ningún tipo de signos cartográficos del lado de la frontera chilena, por donde lo íbamos a ascender dada la proximidad de la montaña con la ruta internacional, y finalmente nuestras ganas de continuar hacia lo desconocido.

Las Grutas:
Partimos desde Pastos Largos hacia Las Grutas, contemplando más adelante en el camino la imponente posición del Inca Huasi, - comprendimos nuevamente la estrategia de la pirca inca existente en la cumbre que habíamos visto en nuestro ascenso realizado del Marzo, junto con Mirta y Alejandro Jiménez, era un maravilloso puesto de observación y comunicación.
Pudimos observar manadas de burros salvajes y guanacos, que nos hacían apartarnos por momentos del hipnotismo que las altas cumbres nos despertaban.
Llegamos por fin a las Grutas, en los 4.000 metros y luego de realizar los trámites en el control de Gendarmería Nacional y saludar a la gente de Vialidad Provincial, obtuvimos una vez más de ellos un lugar en su bunquer vial para pasar la noche.

Campamento Base:
Al día siguiente,  pasadas las 9 de la mañana y luego de una contemplación del Inca Huasi y del San Francisco, iniciamos la marcha hacia la frontera. Nos tocó cruzar y sortear varios pequeños glaciares acostados sobre el camino, por encima de los 4.300 m que como recuerdo de pasadas nevadas se negaban a desaparecer.
Bordeado el San Francisco, que da nombre al paso, y marchando ahora hacia el Sur Oeste, discurrían las montañas a nuestro costado izquierdo, observando las vertientes chilenas del Inca Huasi y  del Ojos del Salado. Pronto llegamos al punto limítrofe donde se levantan los hitos fronterizos y donde un  monolito recuerda el paso por el lugar del descubridor de Chile, Diego de Almagro.
De pronto y en medio de la impresionante pluralidad de montañas un espectáculo inusitado, se ve a lo lejos el brillo de la Laguna Verde. Algo totalmente impensado pero con una fuerza de realidad que absorbe totalmente al viajero. El imponente verde turquesa de esta laguna es imposible de describir en palabras. Su salinidad no impide la vida de aves en sus afluencias, y lo demuestra la populación de rosados flamencos. En su entorno sur aparece el nuevo retén de carabineros. Vacío lugar de control, por la época del año. Estarían por llegar.
Estábamos a unos 20 km. de la línea de frontera. Pronto vimos también, abandonado, el viejo retén de carabineros ubicado al lado del quemado refugio Murray, por donde se accede al Ojos del Salado. Seguíamos avanzando y no podíamos descubrir la montaña de nuestro objetivo.

Luego de atravesar varios y gruesos manchones de nieve congelada que habían sido rotos por alguna máquina para darle continuidad al camino, pero con profundas canaletas que había que atravesar con sumo cuidado, detectamos dos operarios viales que nos indicaron que nuestro cerro estaría frente al Km. 205. Se hace difícil entender explicaciones aparentemente sencillas cuando no se conoce o establece referencia visible fija alguna. Un solitario y gran zorro, desde el costado del camino, contempló nuestro devenir a esos 4.300 m de altura.
Volvimos a utilizar nuevamente el GPS, nos daba dirección, pero hacia ella varía varios picos. ¿Cual era? ¡Había que acercarse más!
Al pasar luego de rodear otro glaciar sobre el camino atajo, y descubrir los restos de una expedición, seguramente proveniente desde Chile, donde aparecieron pomponas de gas y un bidón con agua entre otras cosas, nos dimos cuenta que estábamos cerca. Lo que no supimos hasta después, es que estábamos enfrente del Tres Cruces, viéndolo desde el Oeste, o sea desde Maricunga (dibujo 1°). Ya que lo que creíamos era un pico, eran tres y separados, pero no terminaba ahí...


Debíamos volver a la ruta internacional. Lo hicimos  triangulando la posición desde los restos del campamento abandonado encontrado. Luego desde la ruta recién pudimos determinar mejor nuestro objetivo, e ingresamos dos kilómetros hacia el este, (exactamente a 40 km. de distancia del retén de carabineros de Laguna Verde, viniendo desde el Paso San Francisco
(dibujo 2°).


Dibujo extraído de videofilmación del Cordon Tres Cruces, entrando por la ruta internacional, desde el lado chileno, y a 40 km. de distancia rumbo sur, desde el retén de carabineros de la Laguna Verde, a la que accedimos por el Paso Internacional San Francisco desde Argentina.


Por suerte habíamos salido temprano desde Las Grutas en el lado argentino, lo que nos permitió  llegar a lo que sería nuestro Campamento Base a las 16,30 horas de ése día y luego de tanta confusa averiguación y peregrinaje.
Cansados armamos nuestras carpas y nos dedicamos a preparar nuestras bolsas y comer bastante. Estábamos a poco más de 4.300 metros.
Nuestro GPS apuntaba hacia la tercer cumbre desde la ruta, o sea la sur-este. Ya nos preocuparíamos luego de determinar la posición exacta del pico limítrofe.
El día siguiente lo dedicamos a descansar y aclimatarnos en nuestro campamento base. Siempre con la incógnita de encontrar el Tres Cruces. . Nuestras dudas seguía existiendo, cual de las tres montañas era el Tres Cruces, y cual era la más alta. Aun no sabíamos que era un Macizo, pero comenzamos a intuirlo. Personalmente lo hice a mitad de la madrugada cuando vino a mi mente la expedición que hicimos al Pissis, que también presenta características de macizo dado por sus 5 cumbres principales.

Campamento Uno:
Miércoles 12. Partimos a las 9,40 abandonando nuestro campamento y rumbo a la cumbre. Esperamos a que saliese el sol para dejar las carpas. Es un lujo que se puede dar con suerte hasta el campamento uno, aunque sólo recomendable cuando se conoce la ruta.
El GPS nos fue alejando de la cumbre Norte y también de la Central, y apuntaba con insistente fuerza hacia el sur, no dejándonos nuestra posición apreciar los perfiles de las cumbres que nos rodeaban. Pasamos por glaciares que iban tomando cada vez mayor inclinación y nos encontramos  pronto a los 4.850 m. Seguimos transitando blancos y pequeños  penitentes, donde de cuando en cuando aparecían insertas entre ellos algunas mariposas muertas. Tal vez el viento las llevase a ésa altura, arrastrándolas vaya a saber desde donde y de que suerte de migración. A las 15,40 y luego de 6 horas de marcha superamos los 5.200 m. Decidiendo por el fuerte viento existente montar nuestro campamento uno. Demoramos en ello mas de una hora y media hasta lograr el armado de nuestras carpas, por las molestas y frías ráfagas de viento que nos obligaban a resguardar periódicamente nuestras manos en los bolsillos. A las 18 horas un tibio té, seguido a las 19 por una frugal cena que permitió, luego de  una charla, que a las 20 tratáramos de conciliar el sueño, con todos los pormenores que la altura produce sobre nuestro organismo.

Campamento Dos:
El jueves  trazamos el plan del día y partimos hacia el campamento dos. Separamos en bolsas la basura que la vuelta recogeríamos tratando de dejar ese espacio sin ningún tipo de contaminación.
El clima había cambiado ya que el fuerte viento había transportado las nubes que nos taparon las cumbres el día anterior y aparecía un fino manto helado sobre todas las montañas. Aún no sabíamos que íbamos a subir, habíamos traspasado dos cumbres de importancia, la última la Central y el GPS nos delataba una distancia, hacia una cumbre que no veíamos, en línea recta de 6 km., en sentido sur. Ascendimos el acarreo que separaba al pico Central del tercero buscando lo más directo posible posicionarnos a más altura. Llegamos así a los 5.850 metros. Otra vez el viento en el momento de montar nuestras carpas. A las 19 horas y luego del té de la tarde, la cena, como el día anterior, respetando fielmente los horarios (no había otra cosa que hacer). Luego a escuchar radio y tratar de dormir, ya que ni ganas de hacer bromas existía por el cansancio.

Buscando la Cumbre Limítrofe:
Iniciamos temprano, muy pasadas las 8 la salida desde nuestro último campamento, buscando afanosamente la cumbre y sin poder verla. Pronto superamos en altura al Pico Norte, contemplando el precioso glaciar que lo faldea, ya habíamos alcanzado los 6.200 m y seguíamos  ascendiendo. Lamentablemente sin ver que apareciera la fantasma montaña que nos indicaba el GPS existía adelante, en algún lugar y ahora a 2 km. de distancia. A los 6.300 metros desistieron Marcos, Mariano y Has, la falta de visualizar un objetivo que se resistía a aparecer ante nuestras vista, hacía parecer vano el intento.
Seguimos con Mirta, en ésta. la tercer pirámide. Luego veríamos cual era la de mayor altura. Llegamos así a los casi 6.500 metros y apareció de golpe, tras ir volteando la cumbre que  ascendíamos, a unos 250 metros de distancia y como una inexpugnable torre de más de 150 metros por arriba nuestro, la buscada y ansiada cumbre limítrofe del sistema Tres Cruces. Era una cuarta. Ahí entendimos que el maldito GPS jamás se había equivocado. El sentido y la distancia eran correctas, pero por la perspectiva, el cúmulo de conos, la distancia y en el ángulo visual que teníamos, era prácticamente imposible determinar previamente su tremenda importancia.
Por la hora 15,30 decidimos continuar en la cumbre que estábamos. Poco después y luego de atravesar varios inclinados glaciares llegamos a la cima de la Sur.
Miramos todo en derredor, la cumbre Norte por debajo, la Central unos 100 metros por arriba y a nuestro noreste la cumbre hito, con más de 150 m por encima y como burlándose diciendo ¡yo soy la más alta...!
Pero gracias al GPS,  al costado noreste del pico de la cumbre chilena y atrás de ella, apareció un morro como una aislada torre de un castillo, de no muy fácil ascenso ya que estimamos necesitaría cuerdas en varios pasos. Este morro vigorosamente se yergue por unos 200 difíciles metros por encima de la altura de la tercer cumbre. Esa era la posición que delataba nuestro GPS, que habíamos establecido previamente de la carta del IGM,  y que no podíamos hallar a medida que íbamos ascendiendo y bordeando los picos. Eso fue lo que nos motivó a atacar el tercero que era el que más se aproximaba la  posición indicada por el artilugio satelital.

El espectáculo era impresionante. Todo se apreciaba en la distancia. Desde los grandes salares al Oeste y muchas de las cumbres más altas de América, hasta la vista de nuestro campamento  base donde habían quedado dos carpas armadas. Todo ello hacía que el tremendo cansancio que teníamos desapareciera como por arte de magia, junto con los temores que el no encontrar a nuestra montaña anidaban en nosotros. Filmamos lo que pudimos ya que el frío me había inutilizado 3 baterías, las que sólo duraban unos segundos. Y dado la hora unido al no tener noticias del resto de los expedicionarios nos decidió a bajar.
Regresamos al campamento dos al que llegamos extenuados. Nuestros compañeros ya estaban en sus bolsas recuperando energías. Luego de los normales rituales de comidas, descansamos tratando que pronto llegase el sueño. Al día siguiente con el sol casi alto iniciaríamos el descenso hacia el campamento base, previo llevar la basura de este campamento y de recoger la que habíamos embolsado en el campamento uno.
Llegamos a las 13,30 a nuestros vehículos y luego de descalzar nuestros pies de las pesadas botas, procedimos a levantar el campamento. El ronroneo de nuestros vehículos al hacerlos arrancar nos dio una sensación de seguridad. Queríamos atravesar la frontera lo más pronto posible para tratar de pernoctar en Fiambala, sus termas, y poder regresar al día siguiente Domingo  directo a Mendoza.

.
                                                                                              Jaime Suárez





NACIMIENTO

NACIMIENTO

Cumbre Principal

ascendido el 6  de Marzo de 1998



Vista del Nacimiento durante ascenso al Walter Penck





Refugio Quemadito, y lugar donde quedan los vehículos










Cumbre Nacimiento, al fondo izq. glaciar del Pissis. Jaime, Mariano y Omar




José Luis González, en la cumbre del Nacimiento


Eran muchas emociones, pero no podíamos quedarnos allí, debíamos regresar.




Jaime Suárez
Mendoza, Marzo de 1999.-

IZTACCIHUAL Y POPOCATEPETL



VOLCANES DE MEXICO

IZTACCIHUAL Y POPOCATEPETL

ascendidos en 1997 y 1992 respectivamente


Jaime Suárez



En la última quincena de Diciembre del 2000 el Popocatepetl que venía siendo desde meses atrás cuidadosamente monitoreado y controlado en cuanto a evaluación de riesgo, entró en una importante actividad volcánica con etapas explosivas que lanzaron fragmentos incandescentes a más 1 y 2 kilómetros de distancia - enviando mucho más lejos a material de menor tamaño -, mientras elevaba una columna de ceniza a más de 3 km. de altura.
Se limitó de inmediato el acceso a unos 10 km. de distancia del mismo, incluyendo el sector que involucra el llamado Paso de Cortés y posteriormente se lo amplió a 23 kilómetros, obligando a estudiar y planificar la evacuación de unas 41.000 personas que habitan su entorno, muchas de las cuales ya habían comenzado a abandonar sus hogares.
Luego de unos 50 años de tranquilidad eruptiva, hacía 5 que había iniciado su actividad con erupciones y emisiones de cenizas y gases, lo que motivo a las autoridades a mantener la atención sobre el mismo y evitar la práctica del montañismo en sus laderas. A pesar de las prohibiciones cinco montañeses que lo ascendían aparecieron muertos en la zona cercana al cráter, en Mayo de 1996. Esto demuestra lo acertado de las medidas tomadas.


 El Popocatepetl, segunda cumbre mexicana, con 5.452 m y con la fumata volcánica que desde hace meses impide pueda ser ascendido


Como andinistas, que a veces los ascendemos, nos interesamos en los volcanes y rudimentariamente aprendemos que, en las formas de evolución de nuestro planeta, éstos se forman sobre una abertura por la que salen del interior de la tierra, gases, lava y roca fundida - magma – los que por acumulación van incrementando, en forma de montaña, el tamaño del volcán. El Popocatepetl es un volcán activo que ha tenido fuertes erupciones separadas de lapsos de reposo variables y como todo volcán activo representa un importante riesgo potencial. Hasta ahora las emisiones de ceniza no se consideran que pongan en peligro la seguridad de las poblaciones que lo rodean, pero de persistir la actividad podrían producirse lluvias moderadas de fragmentos de rocas y tal vez flujos de lodo motivados por el deshielo de los glaciares que aún coronan esta bella montaña. Ojalá en breve tiempo podamos nuevamente escuchar noticias de ascensos a su cumbre.


Había partido, durante un frío fin de Mayo del hemisferio Sur , vía Chile en un vuelo directo a México. Al arribar al aeropuerto me estaban esperando miembros de la Federación Mexicana de Excursionismo y Montañismo, viejos camaradas de la montaña con los que recordamos experiencias compartidas de ascensos por América, mientras esperábamos el vuelo en el que llegaba, - desde Guatemala donde se encontraba en una misión de paz del Ejército Argentino-, el Teniente Coronel José H. Hernández. Muy pronto nos reunimos todos junto a otros montañeros que arribaban de diversas partes de América y Europa.
Asistiríamos en Amecameca (a unos 60 km del Distrito Federal y a casi una hora de auto) al 4° Congreso Internacional de Protección y Difusión de Ecosistemas de Montaña organizado por la UPAME - UNION PANAMERICANA DE ASOCIACIONES DE MONTAÑISMO Y ESCALADA- y la UIAA –UNION INTERNACIONALE DES ASSOCIATIONS D´ALPINISME -. Luego de tratar los temas presentados por las federaciones participantes se emitiría la Declaración de Amecameca, íntimamente relacionada con los problemas de la ecología de montaña.

Todo México es un museo natural, donde destaca la belleza de sus montañas. Las cinco principales son: El pico de Orizaba 5.747 m, Popocateptl 5.452 m (Latitud N 19°01´18.30 Longitud O 98°37´39.50), Iztaccihuatl 5.386 m, Teyotl 4.570 m y Malinche 4.461 m. Si bien la cumbre más alta es el Orizaba, las más trascendentes y preferidas son el Popocatepetl y el Iztaccihual. Estos volcanes forman al Parque Nacional Izta-Popo de 25.679 Ha. Sus cumbres, separadas entre sí por unos 30 km. de distancia, eran antiguamente contempladas desde muchos lugares de la capital de este bello país, a pesar de encontrarse a mas de 70 km. Pero en la actualidad la contaminación atmosférica hace prácticamente imposible la visión de ellas. Esta contaminación es producida por más de 3 millones de vehículos y los más de 20 millones de habitantes del Distrito Federal (tal vez la ciudad mas poblada del planeta) ubicado a los 2.238 m de altura en un valle rodeado de volcanes, casi todos apagados.

Iztaccihuatl significa en el idioma Náhuat “mujer dormida” porque su perfil parece una mujer acostada, destacándose perfectamente desde la distancia la cabeza, el pecho, el vientre, rodillas y pies. Popocatepetl significa “montaña que humea” y es fácil imaginar su perfil como la figura de un guerrero arrodillado y apoyado sobre su escudo. Hay una bella y triste leyenda que se pierde en el tiempo y cuenta que cuando llegaron los Aztecas al Valle de Anáhuac y aún las montañas no terminaban de formarse, nació en Tenochtitlán una princesa Mexica llamada Mixtli. Su belleza hacía que fuese asediada por muchos nobles, en especial uno cruel y sanguinario llamado Axooxco. Pero ella amaba a un guerrero, Popoca, que había partido a luchar para conquistar el título de Caballero Águila y así poder conseguir, sobre el otro pretendiente, la mano de la princesa. Ésta ante el peligro que correría su amado y no queriendo aceptar a Axooxco, se quita la vida. Popoca regresa victorioso, y al ver muerta a la mujer que ama, tomó su cuerpo en sus brazos y se encaminó hacia las montañas. Allí permaneció acongojado al lado de ella, agachado a sus pies, hasta morir, pensando que la nieve podría despertarla del sueño. La muerte los convirtió en estos volcanes, Iztaccihuatl (mujer dormida) y Popocatepetl (montaña que humea) y se yerguen cercanos dominando el horizonte lejano de la ciudad de México.
Separado de ellos y más cerca de la capital, el actual Ajusco (representando a Axooxco), con sus 3.937 metros también impone su perfil.

Luego del congreso inexorablemente se imponía ascender a una montaña, que sería el Iztaccihuatl, y que tan cerca de nosotros (a unos 20 km.) habíamos tenido durante nuestras reuniones. Puede accederse a ella durante cualquier época del año, aunque sus mejores condiciones son en invierno. Es recomendable hacer cumbre antes de la una de la tarde, ya que suele cubrirse luego de nubes que dificultan ver el camino de retorno.
Con mucho entusiasmo nos preparamos para ascenderlo con Jordi, Joan y José junto a otros montañistas chilenos, venezolanos, guatemaltecos, colombianos, venezolanos, franceses, españoles y mexicanos.
jaime suarez
Ascendiendo el Iztaccihual...

También se podía apreciar desde Amecameca al Popocatepetl. El Popo, como cariñosamente se le denomina, hacía honor a su nombre ya que desde hace un tiempo una gran e intensa columna de blanco humo volcánico lo comunicaba con las nubes de altura. Su acceso estaba denegado por la actividad volcánica que presenta. Mientras nos desplazábamos en el micro que nos conducía al paso de Cortés, que separa a ambas montañas, - lugar desde el cual el conquistador proveniente de Veracruz, casi cinco siglos atrás, pudo contemplar la grandiosidad de Tenochtitlán -, no pude dejar de recordar cuando unos años atrás (1992) lo había ascendido luego de pernoctar en el cercano paraje de Tlamacas.
jaime suarez
Julia, Sara, Mercedes, Jaime, abandonando el refugio rumbo a la cumbre del Popo

Allí se encuentra el cómodo y bien instalado albergue de montaña Vicente Guerrero, a los 3.900 metros de altura. En esa oportunidad partimos del refugio antes de la salida del sol, que pronto nos brindó un maravilloso amanecer, ascendiendo sobre una arena de lava muy fina y manchones de nieve congelada. A los 4.400 metros de altura y luego de 3 horas de marcha, accedimos al lugar denominado Tres Cruces. Tras un breve descanso encaramos la pendiente del cono volcánico. Poco a poco y a lo largo de 4 horas fuimos superando los 1.000 metros que nos separaban de la cumbre. Al llegar a los 5.300 metros accedimos a un sector del borde del cráter, que tiene un diámetro de 350 metros y una profundidad de 250, debimos bordear durante una hora un sector del mismo para acceder a la parte más alta de esta montaña, soportando emanaciones sulfurosas que varias veces nos obligaron a poner nuestra boca muy cerca del suelo.


 Durante el ascenso, un pequeño descanso al borde del cráter

Desde la cumbre pudimos apreciar parte del Iztaccihuatl sobresaliendo majestuosamente entre un espeso manto de nubes. Recordé muy bien que me prometí volver para ascenderlo, y ahora 5 años después, lo estaba cumpliendo.

Tras pasar el Paso de Cortés, 3.650 m, llegamos a la La Joya, en el sur del volcán. Allí termina el camino y quedaría el vehículo esperándonos. En este sitio es necesario asentar los datos de los montañistas, con fecha, horario, rutas y día estimado de retorno, en un libro del Socorro Alpino Mexicano, que se guarda en una caseta de color amarillo y al regreso se debe anular el registro. Iniciamos la marcha del grupo ya pasado el mediodía. Una ligera nevada comenzó a molestar nuestro ascenso, y no nos abandonó durante las 4 horas que tardamos hasta el refugio República de Chile, que se encuentra por los 4.700 m y al que accedimos luego de superar los “pies” de esta montaña. En su entorno hay espacio para acampar. Luego de comer algo nos acomodamos en las literas superpuestas y colectivas y logramos el sueño entre las consabidas bromas sobre costumbres de las diferentes nacionalidades que integrában la cordada. Este refugio fue destruido posteriormente por el fuego provocado por irresponsables que no llegan a comprender la importancia que tiene para un montañista ni el trabajo de mantenimiento que le cuesta, en este caso, al Grupo de los Cien de México, una ejemplar institución de ecologistas miembros de UPAME.
A las 5 de la mañana, luego de un liviano desayuno y de colocarnos todo nuestro equipo incluidos los grampones, iniciamos el ascenso superando glaciares, transitando collados y sorteando peñones. Acompañados por ventiscas y nevadas esporádicas llegamos a “las rodillas”



El grupo avanzando rumbo a la "panza" del Iztaccihuatl

 y de allí a “la panza”.
jaime suarez


Tras una fuerte inclinación accedimos al “pecho”, donde está la cumbre principal con sus 5.386 m. Habíamos demorado en ese desnivel de poco mas de 600 metros más de 4 horas, fundamentalmente a causa del clima. No dejamos de festejar eufóricamente y de abrazarnos todo un singular grupo de alpinistas, andinistas e himalayistas. Una densa nube que nos envolvió en la cumbre comenzó a imposibilitar la visión a pocos metros y a hacer aparecer con tonos grises los colores de las banderas que se desplegaban.
El regreso se realizó muy lentamente, bajo situación no exenta de peligro a causa de la ya desatada tormenta, hasta los 3.500 metros donde por fin terminaba la capa de nubes y viento y estaba despejado. Más tarde llegamos a La Joya , donde luego de asentar el regreso, partimos en vehículo hacia Amecameca y, tras cargar equipajes, al Distrito Federal, donde seguiríamos cumpliendo compromisos oficiales .

------------------------------------------------------------------------------------------------
En el año 1521, y tras un segundo intento, fue un grupo de soldados enviados por Hernán Cortes, motivados por la necesidad de obtener azufre para fabricar pólvora, quién subió el Popocatepetl y alcanzó el borde del humeante cráter. El primero es ascenderlo fue el capitán Diego de Ordaz. Luego fue bajado dentro de un canasto Francisco Montaño, quién, con mucho trabajo halló azufre sedimentado en las entrañas del volcán
Se puede leer en “Cartas de la conquista de México” como midieron el cráter del Popocatepetl: “...y había de la una parte de la boca a la otra dos tiros de ballesta” Comparada la forma de tomar medidas de esa primera probable ascensión, con las que actualmente aplicamos utilizando el GPS, no deja de ser anecdótica.

jaime suárez

12 octubre, 2008

VOLCÁN PAYUN LISO






VOLCÁN PAYÚN

ascendido el 9 Octubre 2005

Por tierra de volcanes 1° PARTE

(Reserva Natural El Payén)

Por Jaime Suárez







En la reserva natural El Payén.



Ficha de ascenso
Integrantes de la expedición:
Jaime Suárez, Patricia Garis y David Flores.
Cumbre alcanzada:
Volcán Payún Liso. Una vez alcanzado el labio del cráter se accede al montículo mayor, ubicado al sur. Posición S 36°30´856 y O 69°17´113.
Altitud:
Oficial 3.836 m sobre el nivel del mar. Estimada en cumbre por GPS 6.833 m.
Ruta:
Por la vertiente oeste.
Época más adecuada de ascenso:
Prácticamente todo el año exceptuando el invierno en que las nevadas pueden aislar la reserva.
Dificultad:
Poco difícil. Conviene llevar grampones, aunque no se usen, ya que según el año y/o al inicio o fin de temporada se pueden presentar glaciares en la ruta. Es fundamental buen estado físico en caso de realizar el ascenso en una jornada.
Equipo:
Tienda. Hornillo. Abrigo de Alta Montaña, ya que es engañosa su poca altura y se puede suponer que no hará frío. Rompevientos, chaqueta o campera y bolsa de dormir de altura. Guantes y mitones, zapatos. Bastones, gorro, gafas U.V., GPS. Llevar abundante agua, no hay en la zona.




Campamento Base en el Payún Liso.




La vista era espectacular. El Payún posee un truncado e inactivo cráter con glaciares en su cara interior norte y caída de colada hacia el noreste. Hacia esa misma dirección nos separaban 12 kilómetros del centro del cráter del Payún Matrú y 15 a su cumbre Morado Alto, al final de este volcán.


Volcán Payún, a mis pies el cráter, y al fondo el Payún Matru.


Hacia el oeste a exactos 100 kilómetros de distancia resaltaban en la blanca cordillera de Los Andes, los 4.709 metros del Volcán Domuyo.


Volcán Tromen, hacia el suroeste, dos secuencias
jaime suarez







Datum,WGS 84

BARDAS BLANCAS,-35,51.270,-69,47.993,Bardas Blancas,
INGRESO,-36,18.788,-69,39.940,Ingreso desde ruta 40 a zona Payunia,
CAMINO CONSOLIDADO,-36,13.442,-69,30.057 ,1617 metros
CAMINO CONS 2,-36,11.942,-69,26.456,1779 metros
DESVIO,-36,12.637,-69,23.779,1776 metros
CAMINO,-36,15.544,-69,24.589,1755 metros
CAMINO 2,-36,20.812,-69,24.864,2108 metros
CAMINO 3,-36,23.639,-69,23.461,2291 metros
CAMINO 4,-36,25.036,-69,22.853,2268 metros
CAMINO 5,-36,26.396,-69,22.972,2204 metros
REAL MOLLE,-36,27.405,-69,22.769,2189 metros
HUELLA,-36,29.075,-69,22.331, 2119 metros
HUELLA 2,-36,31.070,-69,21.697, 2045 metros
ZONA INGRESO,-36,32.369,-69,21.826, 1979 metros
HUELLA VEHIC,-36,33.176,-69,20.891,1932 metros
HUELLA VEHIC2,-36,33.640,-69,20.342, 1921metros
CAMP BASE,-36,31.928,-69,19.186, 2206 metros
ASCENSO 1,-36,31.129,-69,18.156, 2907 metros
ASC 2,-36,30.878,-69,17.848, 3272 metros
ASC 3,-36,30.773,-69,17.657, 3486 metros
ASC 4,-36,30.706,-69,17.404, 3675 metros
ZONA CRATER,-36,30.706,-69,17.324, 3748 metros
CUMBRE,-36,30.857,-69,17.113, Cumbre de Volcán Paýun, 3833 metros



VOLCÁN TROMEN


VOLCÁN TROMEN

ascendido el 1 Diciembre 2007

Por tierra de volcanes....2º parte


Área natural protegida
Parque provincial TROMEN - Neuquen

Por Jaime Suárez


En la cumbre



Jaime Suárez
Diciembre 2007

VOLCÁN GALAN

VOLCÁN GALÁN

ascendido el 17  Octubre 2003

Cráter del Galán, borde sur


5.912 m.s.n.m.
EXPEDICIÓN REALIZADA DESDE EL 13 AL 18 DE OCTUBRE DE 2003 POR MIEMBROS DE U.P.A.ME., C.A.M. Y JANAJMAN.

INFORME DE LA EXPEDICIÓN DE CUMBRE
Y EXPLORACIÓN

Fecha de inicio: 13 de Octubre de 2003.
Fecha Finalización: 18 de Octubre de 2003.
Cumbre: principal Volcán Galán, 5.912 m.
Ubicación: Noreste de Catamarca, en el límite con Salta. L S 25°56´394 y L O 66°55´142.
Fecha de Cumbre: Viernes 17-10-2003.
Objetivos: Exploración de este volcán, con indicación de cumbre, alturas y rutas de acceso.

VOLCÁN GALÁN
Volcán Galán, ¡El cerro de las Estatuillas...! Mientras me dirigía en mi auto para encontrarme con el resto de la expedición en Hualfil (Catamarca) no dejaba de pensar en la lectura que sobre esta montaña había hecho en el estupendo libro “El Enigma de los Santuarios Indígenas de Alta Montaña” de Don Antonio Beorchia Nigris. En él se citan relatos del Dr. Rolf Dangl y de Matías Rebitsch -el famoso alpinista austríaco que también estuviera en el Llullaillaco-, tales como que... “al poner pie en el punto más elevado del alargado filo de la cumbre, encontró tres círculos de muros, tapados hasta arriba con escombros”. También que partió Rebitsch en 1956, para investigarlos, cabalgando desde Angastaco, Salta, hasta el pie del “Gallán” y que ascendió desde un campamento a 5.300 m. y al llegar a la cumbre contempló las citadas construcciones muradas donde comenzaron sus investigaciones durante dos días más, incluidos los ascensos y descensos. Encontró entre otras cosas una pequeña escultura de llama de material de concha, una bolsa con coca, un ídolo de plata con vestidos multicolores en miniatura, luego otro, y finalmente una tercer estatuilla. Hasta aquí mis recuerdos de estos datos, pero eran más que suficientes para motivarnos a realizar tan esperada expedición.

Ubicación
El multicumbrero macizo del cerro Galán, con un diámetro aproximado de unos 20 kilómetros de Norte a Sur y unos 15 kilómetros de Este a Oeste, florece dentro de una caldera volcánica de unos 35 km. de alto por unos 25 km. de ancho. Aparecen así en el inmenso cráter algunas decenas de cumbres que constituyen el “cerro Galán” muchas superiores a los 5.500 metros y entre las cuales se hallaba la que había subido Matías Rebitsch y deberíamos ascender. A la izquierda de la caldera descansa la Laguna Diamante cerca del punto de confluencia de los 26° de latitud Sur y 67° de Longitud Oeste, la que es una preciosa muestra salada de un muy antiguo inmenso cuerpo de agua que ocupaba gran parte del cráter. Hay también un pequeño río, mejor diría arroyo, el Rebitsch, que lo bordea en su sector Este, con cauce muy moteado por formaciones de pasto. Probablemente nazca desde afluencias del faldeo Este frente a la cumbre del Galán, y se dirija de Sur a Norte hacia el zona del Salar del Hombre Muerto, y llamaremos Río Rebitsch y un arroyo Sur que nace también con afluencias del sector Este y del Sur del Galán desembocando, con otras filtraciones, formando el Río Diamante, , terminando con sentido Norte a Sur en la laguna Pabellón, previa y cercana a la Diamante. Hay una tercer y pequeña laguna en el sector Noreste del cráter, dentro de un cono volcánico, llamada “Culismundi” o “ Perla del Galán” .
Hasta la década de los años 70 se lo conocía como Cerro Gallán, y fue recién con la aparición y estudio de las fotos satelitales cuando se descubrió que toda esa zona era un inmenso cráter volcánico. Es muy valioso el aporte que las fotos satelitales hacen a los andinistas que aprenden a interpretarlas, en especial en zonas y montañas poco conocidas. Las cartas suelen necesitar actualizaciones en esas circunstancias. En el caso del Galán su posicionamiento en las cartas es claro, y las mismas reflejan la geografía que lo rodea con excepción de la laguna “Culismundi” y el arroyo Rebitsch. La posición de cumbre que tomamos fue Latitud S 25°56´394 y Longitud O 66°55´142, y la altura 5.912 metros.

El Encuentro e inicio de la aventura
El lunes 13 de Octubre y tras completar setecientos kilómetros desde Nono, donde había participado en el 4° Encuentro Nacional de Montañistas, pude encontrarme en Hualfil, Catamarca, con Hans y el resto de los expedicionarios. Parte del grupo había salido el día anterior directamente desde Mendoza, y a él se había unido Alejandro que venía desde Salta. En el Automóvil Club de Hualfil llenamos los tanques de gas-oil y un bidón extra cada uno. A partir de esta localidad se haría dificultoso obtener combustible. Con toda la carga distribuida decidimos continuar. Regresamos hacia el Sur unos kilómetros hasta el cruce que sale para Antofagasta de la Sierra y tras unos 8 km. desviamos en Puerta de Corral Quemado hacia Villa Vil, donde intentaríamos dormir dado la hora y el agotador viaje. Una charla con el intendente que se encontraba en los baños termales nos permitió enterarnos de que el lugar en que daban pensión se hallaba ocupado en su totalidad. Nos aconsejó continuar los 18 kilómetros que nos separaban de Barranca Larga, 26°59´120 y 66°44´314, a los 2.500 metros de altura, donde felizmente nos hospedamos en una hostería-almacén-bar que había sobre la ruta. Por 6 pesos por cabeza descansamos muy bien. Una rápida cena y al día siguiente continuaríamos hacia El Peñón.
Pronto, y por un camino muy bien consolidado pasamos por la zona de la Quebrada Peña Fría, donde tomé la posición, 26°44´563 67°04´180 con 3.895 metros. Nuestro camino había rodeado la Laguna Blanca y más adelante apareció una apacheta ubicada a los 3.987 metros en posición 26°44´632 y 67°06´257 previa a la bajada a Laguna Pasto Ventura y luego vimos el Puesto Ventura a 3.890 m (26°41´310 y 67°10´997). Desde hacía ya muchos kilómetros podíamos contemplar preciosas y despreocupadas manadas de vicuñas. El hecho de ser la zona una reserva natural y de estar prohibida su caza, ha permitido un importante aumento de estos camélidos. Es muy agradable poder verlos a la vera del camino. Con rápida trepada recuperamos los metros descendidos y a los casi 4.000 metros estábamos en el Paso Ventura, en la posición 26°40´866 y 67°11´771. Pudimos admirar a más de 100 km. de distancia las partes más altas de los inconfundibles perfiles del San Francisco (6.008 m.) y el Inca Huasi ( 6.638 m) en el Paso de San Francisco. Siguiendo el viaje aparece otra laguna blanca, a los 3.833 metros, en posición 26°38´014 y 67°14´280, y finalmente, ya al mediodía accedimos a El Peñón 3.450 m 26°28´547 y 67°15´880. En este sitio pasaríamos la segunda noche. Nos acomodamos en la sección de Hospedaje que tiene la Municipalidad del lugar ($ 7,00 por cabeza). Donde entre otras comodidades cuenta con servicio telefónico y mesas y sillas. Esta población tiene 300 personas y se pueden adquirir artículos regionales de telar. Luego del almuerzo salimos a recorrer los alrededores y ascendimos en proceso de aclimatación un pequeño cono volcánico cercano. Nos vino muy bien el ejercicio aunque ninguno de nosotros aquejaba ningún malestar por la altura.
El Miércoles 15 saldríamos desde este pueblo a las 9 de la mañana.

Hacia el Galán
Hasta El Peñón habíamos tenido un camino consolidado en bastante buen estado, aunque de un accidentado fluir de desniveles. Ahora nos encontrábamos sobre una cerrada huella de 4x4, que deberíamos transitar a lo largo de más de 80 kilómetros. Partimos de los casi 3.500 metros y a medida que transitábamos se mantenía un suave pero constante ascenso. Pasados los 4.000 metros, tomé la posición 26°19´554 y 67°06´951. Pronto varía un poco el paisaje de cerros al aparecer, a 31 km. del Peñón, una laguna a los 4.263 metros de altura (26°18´116 S y 67°04´943 O) con flamencos rosados. Seis kilómetros más adelante, una segunda laguna a 4.300 metros de altura. (Laguna Grande 26°15´569 S 67°03´437 O). A los 4.500 metros de altura y a 47 kilómetros de El Peñón aparece una tercera laguna. Todas ellas con poblaciones de flamencos. Algún burro salvaje y un solitario suri amenizaron un poco el paisaje que sólo se interrumpía de cuando en cuando por manadas de vicuñas que, en su huída, empecinadamente cruzaban delante de nuestros vehículos. Continuamos la ascendente senda y apareció a los 4.522 metros de altura una apacheta en nuestra ruta, la posición 26°11´232 y 66°59´816, a 49 km. de El Peñón. íbamos en buen camino y lo corroboramos al completar un rápido ascenso que abruptamente termina con una gran y descendente barda. Había que parar.

En el Borde del Cráter
El borde sur del inmenso cráter daba la impresión de comenzar a nuestro pies.


Jaime y Alejandro al borde del cráter, al fondo el Galan


Eran las 11,30 horas y la altura 4.775 metros. La posición 26°07´616 y 66°57´268 a 60 kilómetros de la salida. Luego de un muy pronunciado desnivel, de unos 150 metros, se perfilaba demarcada en el arenoso suelo por varios kilómetros - más de doce- la senda que deberíamos transitar. Ésta se dirigía hacia la laguna Diamante que brillaba a lo lejos. Surgían en el medio del gran cráter las decenas de cumbres que constituyen el “cerro Galán” y entre las cuales deberíamos determinar cual era la más alta. Comenzaron las eternas conjeturas de estos casos de cumbres ignotas, en que todos opinamos y ninguno puede estar seguro. Pero la encontraríamos. Descendimos la fuerte pendiente, de arena tapizada con piedra laja y enfilamos rápidamente hacia la Laguna Diamante. Durante la bajada de los vehículos, nadie dijo nada, pero todos pensamos en cómo haríamos a la vuelta para poder ascender sin problemas semejante subida. Cruzamos el arroyo moteado de pasto, dos cauces casi secos de más de un metro de abrupta bajada y por fin llegamos a las cercanías de la laguna justo a las doce del mediodía. Nuestra posición era 26°01´49767 y °01´058 4.637, estábamos por odómetro a 73 km. de El Peñón.

Hacia La Confluencia de Latitud y Longitud
Hans comenzó a buscar el punto de Confluencia de Latitud 26 y Longitud 67, que encontramos a las 12,18 horas. Había una solitaria pacheta de piedras de unos 35 cms. de altura, seguramente construida por Piri, Polaco y su grupo, cuando según su relato, llegaron a la laguna “Culismundi” o “Perla del Galán”. Sobre la apacheta colocamos nuestros GPS hasta que comenzaron a marcar 4.840 metros de altura y la posición 26°00´000 S y 67°00´000 O. No hay muchos puntos de confluencia en nuestro país y menos a tanta altura. Sacamos las consabidas fotos.

Campamento Base Goma Pinchada
A partir de ahí y en base a la posición de GPS que teníamos de la cumbre del Galán, decidimos encontrar el mejor lugar para armar nuestro campamento base. Penetramos por un leve y ascendente acarreo hasta un viejo glaciar de gastados penitentes que se recostaban sobre una de las suaves laderas, a los 4.920 metros de altura. Nos pareció el lugar más conveniente y protegido. No convenía subir más. Ya era mucha y excesiva altura para nuestro plan de aclimatación y también lo era para nuestros vehículos. Casi a los 5.000 metros las noches y los amaneceres suelen ser muy fríos y penetrantes. Al bajar sentí el indeseado susurro de una goma perdiendo aire en mi camioneta. Era una trasera, que pocos segundos después se desinflaba totalmente. Pero no la arreglaría, lo haría a la vuelta, no había ganas para ello y debíamos aclimatar. Me di cuenta cual sería el nombre de nuestro campamento base en el Galán, se llamaría Campamento Base Goma Pinchada.

Cerro Galán, Campamento Base "goma pinchada"


Estábamos a 86 kilómetros de El Peñón, sobre los 4.920 metros de altura y en 25°57´862 y 66°59´693. Eran las 13 horas.
Armamos las carpas. Un rápido almuerzo de una lata de duraznos al natural, los consabidos tés de la tarde y finalmente una muy liviana cena. En el día habíamos superado casi 1.500 metros de desnivel. Era demasiado. Antes de dormir nos controlamos uno a uno con resultados satisfactorios, pero debíamos estar atentos para considerar urgentemente cualquier problema que se pudiera presentar. A pesar de todo y de los consabidos incontrolables y desordenados sueños con los que colabora la hipoxia, dormimos bien.

Hacia el campamento uno de altura
A la mañana siguiente, Jueves 16, con tranquilidad y con los primeros rayos fuertes del sol calentando nuestras carpas, desayunamos y preparamos nuestra salida hacia el campamento uno de altura, dejando una carpa armada junto a los vehículos, por cualquier emergencia. Eran las 9 horas cuando con la pesada carga de la mochila, que incluía, en algunos casos más de 4 litros de agua, comenzamos despaciosamente a ganar altura en el sentido que nos indicaba la posición de cumbre, que se hallaba a 8 km de distancia. Poco a poco, con la dificultad que da la primer hora de marcha, nuestros pulmones se iban adaptando a cada metro que ascendíamos. Tras 3 horas, apenas pasadas las 12, salimos desde el final de una curva del ascendente y cada vez más estrecho acarreo (en alguna época fue un cauce glacial) a una plataforma en la que se unían tres acarreos descendentes de mayores alturas, que en forma de delta convergían a nuestros pies. Era un buen lugar para el Campamento 1. La altura 5.320 m y la posición 25°57´586 y 66°57´831. Faltaban 4,8 kilómetros en los que deberíamos ascender 600 metros hasta poder alcanzar la cumbre del Galán, la que aún no veíamos ni sabíamos cómo era. Armamos las carpas, que quedarían ahí esperando el regreso ya que al día siguiente encararíamos coronar la cumbre y regresar.
No sabíamos el esfuerzo a desarrollar y si deberíamos ascender varias precumbres pudiendo volver a perder altura nuevamente. Podría ser un día complicado. Alejandro decidió explorar durante dos horas de marcha el acarreo norte. Al regresar nos informó que no había podido determinar la cumbre pero si que el rumbo que llevábamos era el correcto. Un almuerzo liviano. Buena hidratación y frugal cena y a conciliar una larga noche de sueño. Decidimos partir a las 7 y media de la mañana, desayunados y con sólo nuestro equipo de vestimenta completo y un poco de agua y frutas.

Hacia la cumbre
A las seis de la mañana comenzaron los preparativos. Preparamos, aún enfundados en las bolsas de dormir, café con leche, pan con manteca y queso, y luego nos vestimos. Puntualmente, a las siete, estábamos cerrando nuestras carpas, luego de colocar unas pesadas piedras adentro, para evitar que el viento las llevara. Comenzamos la parte mas importante de la aventura. Había un tremendo frío que nos obligó muy pronto a colocar mitones o un segundo par de guantes sobre los que teníamos. Nos dificultó esto poder asir bien los bastones, pero por suerte no había pasos difíciles. Cuando se conoce la montaña que se asciende, siempre es mejor salir con un poco de sol. Se evita así pasar el innecesario y tremendo frío, de muchos grados bajo cero, que se produce al amanecer. Pero en esta circunstancia no esperamos al sol porque no sabíamos qué podría presentarse en nuestra subida que nos pudiese obligar a invertir más tiempo del previsto.
Tras casi 4 horas de trabajoso ascenso y de sortear, franquear, y subir y descender trabajosamente varias cumbres, detectamos la larga cumbre final sobre la que se asentaba la mayor altura del Galán. Un filo rocoso sobre el que sobresalían en el cielo dos promontorios de piedra volcánica, siendo el segundo más alto que el primero. Hacía allí subimos. Era la altura principal. La apacheta sobre la cúspide de la misma lo indicaba. Recordé las palabras, leídas, del Dr. Dangl ... “al poner pie en el punto más elevado del alargado filo de la cumbre...” nunca una descripción me pareció tan precisa. Era nuestra cumbre.

En la cumbre
La posición 25°56´394 S y 66°55´142 O, la hora 11,45 y la altura 5.912 metros. Pronto nos reunimos todos en un largo abrazo. Nuevamente una de nuestras expediciones había logrado las primeras mujeres en una cumbre.


Hans, Alejandro -fotógrafo-, Jaime, Susana, Mirta y Mary en la cumbre del Galan


Escarbamos entre un grupo de piedras colocado un poco más debajo de la apacheta cumbrera y apareció el Libro de Cumbre, en el que sobresalía la leyenda de la altura que anteriormente se le atribuía a esta montaña: 6.600 metros. Las actuales mediciones la han modificado sustancialmente en 688 metros menos.

Mirta con el libro de cumbre y Hans corroborando la altura


Estaban registradas seis expediciones, siendo la última la de nuestro amigo Heber Orona, de marzo de este año. No me fijé si habían registrado en el libro las de Dangl (1950) y Rebitsch. (1956). No había resto alguno ni notorio de las tres construcciones circulares incas. Sí existe en la base de la gran roca de cúspide, un raro socavón de unos 60 cms. de profundidad, que indicaba un fuerte trabajo arqueológico o lo que quedaba de él. Nos sentamos al resguardo del viento y durante más de media hora nos dedicamos a descansar observando golosamente todo el paisaje, tanto cercano, como lejano, que brillante se brindaba a nuestros ojos. Hacia el Suroeste se apreciaba perfectamente, a pesar que se hallaba a más de 180 km., el perfil del Inca Huasi. A poco más de 100 km. hacia el Noroeste el Nevado Antofalla. Hacia el Norte, a unos 60 km. el Salar del Hombre Muerto. Seis kilómetros hacia el Este y destacándose en el desértico entorno,


...el fino y serpenteante cauce del arroyo Rebitsch, con claro hilo de agua moteado totalmente por preciosas orlas de pasto verde. rodea el Galán hacia el Norte. Otra naciente a su sur, continúa ese sentido, debiendo perderse finalmente a través del Río Diamante, en la laguna Pabellón. Es tal vez desde el arroyo Rebitsch, si se pudiese acceder bien en vehículo, la ruta mas apropiada para subir el Galán y la que utilizó Rebitsch. Desde este cauce se aprecia perfectamente, en su dimensión y sin ningún tipo de obstáculo, la cumbre más alta del Galán. Otras cumbres, aunque más bajas se apreciaban hacia el sector sur, pero no eran empalmables directamente desde la nuestra. Se deberían ascender con un intento especial o mediante otra expedición.

Cerro Galán, retorno de la zona de cumbre

Apenas pasadas las 12,30 iniciamos el retorno al campamento 1 de altura a los 5.300 metros, al que llegamos tras casi 3 horas. Para descansar mejor decidimos continuar el descenso hasta el base a los 4.900 por lo que desarmamos nuestras carpas, y con todo el peso a las 16 iniciamos la bajada. En una hora justa estábamos al lado de nuestros coches y de la goma pinchada, que parecía burlarse de mí.
Montamos las tiendas. Había sido una larga jornada. Hans y Susana extrajeron una botella de champán que habían colocado entre los penitentes vecinos y en una alegre y sorpresiva ceremonia brindamos festejando el cumpleaños de Mirta, que coincidió con nuestro día de cumbre.

El Regreso
Al día siguiente, con el sol calentando los coches para facilitar el arranque y luego del cambio de rueda, iniciamos la salida desde el Campamento Rueda Pinchada. Desharíamos lo andado. Subimos con cuidado y preocupación la “gran subida” del cráter, aplicando baja, bloqueo y primera. No resultó complicada como creímos en una primera instancia. Raudamente, con varios cruces de ágiles vicuñas por delante de nuestros vehículos, y luego de traspasar sin detenernos las lagunas y El Peñón, en 6 horas de viaje estábamos en el empalme a Hualfil, en la ruta 40. Ahora a las termas, un merecido y cálido baño y a descansar antes de iniciar el retorno a nuestros hogares...

jaime suárez